La Defensora del Lector de El País atiende la queja de la Masonería

¿Sigue cayendo la sociedad española en las ideas fuerza sobre la Masonería que justificaron su persecución y exterminio cuando no gozábamos de un sistema democrático de derechos y libertades? Esta es la cuestión que la Gran Logia de España ha querido poner sobre la mesa de la Defensora del Lector de El País y que mereció su rápida actuación. Por su interés, El Oriente transcribe nuestra comunicación y la contestación desde el diario, ambas enviadas y recibidas en la tarde del 18 de febrero.

En su edición impresa del pasado domingo, El País publicaba una información titulada "El masón que amasaba fortunas" referida al hijo de la Presidenta de Chile. Desde la Gran Logia de España, la institución a la que pertenecen la practica totalidad de los masones españoles, los lectores de este diario nos preguntamos si ese titular responde al modelo de periodismo de calidad que propugna El País desde su fundación. Máxime, cuando el cuerpo de la información no da ninguna relevancia a esta circunstancia, o al menos no más que a su condición de padre de familia o militante socialista. ¿Por qué elevar su condición de masón al titular? ¿Qué relación se está insinuando? Si el protagonista de la información hubiese sido judío, ¿hubiera sido razonable titular "El judío que amasaba fortunas"? ¿Y si fuese homosexual o de etnia gitana? La Masonería es una institución honorable, impulsora de una fraternidad universal entre todos los hombres en la que haya cabida para la libertad de pensamiento. Por este motivo ha sido duramente perseguida por todas las dictaduras que ha conocido el siglo XX. Este titular, repleto de prejuicios, es equiparable, posiblemente sin pretenderlo, a los que se escribían en la prensa española o alemana en los años cuarenta del pasado siglo. Equipo de Comunicación de la Gran Logia de España dircomunicacion@gle.org

Estimados señores: Aunque no creo que el titular estuviera redactado con el menor ánimo injuriante, estoy de acuerdo en que el término masón (yo no lo compararía con el judío o el gitano porque son valores étnicos) no debería haberse llevado al título. Remito su queja además al responsable de Internacional para que se muestre más vigilante en estos temas. Atentamente Lola Galán Defensora del Lector defensora@elpais.es